Cecilia Coello, voluntaria de Nueva Acrópolis Barcelona, aglutinó a un gran público conocedor de la figura del escritor Herman Hesse.

Cecilia narró la biografía del autor, su bibliografía más significativa y el simbolismo de sus escritos, definiéndolo como un apasionado de la vida.

Hesse, premio nobel en 1946, se declaró amante de la paz. Mitólogo y enamorado de la vida, Hesse siempre buscó el camino interior que conduce al hombre a sí mismo. Consciente de que el ser humano tiene la necesidad de crecer y avanzar, hizo de su vida también su obra, la cual siempre estuvo inspirada por sus propias percepciones y acciones vitales.

“Las cosas que vemos son las mismas que llevamos en nuestro interior”, dice uno de sus personajes. El hombre ha de intentar encontrarse a sí mismo, buscar el verdadero camino, que está tan lejos pero también tan cerca, dentro de él mismo.

Y es que los grandes hombres, los grandes sabios de la humanidad, siempre han visto que el verdadero camino es el del amor. Y este nunca se puede alcanzar si no se aprende antes a encontrarse, a conocerse uno mismo.