Como cada año, Nova Acrópolis Barcelona convoca la Campaña de Navidad y Reyes de recogida y reparto de alimentos, en la que cada año se suman más personas.

Se estima que en Barcelona hay 5142 personas sin hogar, de las cuales unas 1231 pernoctan en la calle. Es un número que año tras año sigue creciendo, pero no se trata solo de una cifra, sino de personas con situaciones y realidades muy complicadas.

Ante esta situación, el día de Reyes un grupo de 56 voluntarios se reunieron en Nueva Acrópolis Barcelona para preparar bocadillos y entregar una bolsa de alimentos a las personas sin hogar de la ciudad de Barcelona. De los 56 voluntarios, 30 eran socios de la entidad y 26 conocieron el proyecto a través de las plataformas Connecta’t, Eventbrite o Meetup.

Preparamos 88 bolsas de comida en las que había un bocadillo, un zumo, un batido, algo de fruta, un yogur y algunos dulces. Siguiendo la línea del año anterior, hicimos unos bocadillos más nutritivos elaborados conpollo y otros vegetales conatún. Además, también preparamos una crema de verduras caliente. Cabe señalar que muchas de las verduras fueron donadas por los comerciantes del Mercat del Ninot. Junto con las bolsas de comida también entregamos algo de ropa de abrigo, una postal artesanal hecha con mucho cariño y una hoja informativa sobre los diferentes recursos sociales de la ciudad de Barcelona.

Se recaudaron 201€ que se dedicaron íntegros a la compra de alimentos.

Entre todos los voluntarios cubrimos 13 zonas de reparto de Barcelona, especialmente en los barrios del Eixample, Ciutat Vella y Sants-Montjuïc, que es donde hay más personas sin hogar pernoctando entre sus calles.

Tratamos de reflexionar sobre el hecho de que el sinhogarismo es un fenómeno multicausal y que, si se dan una serie de circunstancias, todos nos podríamos encontrar en una situación de vulnerabilidad.

Sabemos que se trata de una ayuda puntual en la quelo importante no es solo la comida, sino el sentarnos a su lado, transmitirles nuestros mejores deseos y dedicar un tiempo a escuchar otras realidades, que aunque a veces nos pasan inadvertidas, están muy presentes en nuestra ciudad.

Agradecemos a todas las personas voluntarias que, además de participar, mostraron una gran disposición para ayudar en todo momento.